¿Cómo alimentar a tu caballo en verano?

Piscina para caballos
Fidel Sánchez Alayo – Piscina para caballos

Empezó enero y la temporada de verano se pone cada vez más intensa. Los dueños y criadores de caballos no solo deben combinar una agenda numerosa de competencias y actividades, sino cuidar la salud de sus equinos tanto de las altas temperaturas como de una dieta equilibrada para enfrentarlas.

En el post de hoy te presento una serie de consejos clave para cuidar la nutrición de tus caballos en esta temporada veraniega.

  • Ofrécele agua fresca y limpia

Un caballo puede beber hasta 50 litros de agua al día en el verano. Por esta misma razón:

Siempre debe tener acceso a líquido que esté en buenas condiciones.

Si camina o corre durante largos períodos de tiempo, asegúrate de que se detenga frecuentemente a descansar y beber.

Si complementas su ingesta de líquido con suplementos como electrolitos, el caballo tendrá incluso más sed.

  • Aumenta los electrolitos, fibras y aceites

Las altas temperaturas implican que tu caballo tendrá mucho calor, y bastante sudor. Cuando esto sucede, pierden muchísimas sales y proteínas. Como consecuencia, se produce una baja de electrolitos, claves para el balance de líquidos y la función muscular. Por este mismo motivo, si estos electrolitos no son reemplazados, tu caballo no tendrá ganas de beber, y estará bastante más cansado.

Con el paso del tiempo, he podido darme cuenta que los caballos que están recibiendo dietas de fibra y aceites son menos reactivos a nuevas situaciones y tienen mejor comportamiento que quienes tienen una dieta basada en cereales.

  • Mantén el alimento en espacios adecuados

El calor hace que la alimentación se descomponga bastante más rápido, por lo que es clave mantener el forraje o la alfalfa en lugares fríos y secos, con bastante ventilación. Al mismo tiempo, al comprar forraje, llévalo a un contendor sellable, para prevenir el ingreso de insectos. Si el sitio donde almacenas el alimento sigue siendo caluroso, trata de buscar una mayor circulación de aire, para prevenir que tu forraje o alfalfa se humedezca.

  • Programa una dieta balanceada

La alimentación está básicamente compuesta de dos componentes: agua y materia seca, que puede ser proteínas, fibras, carbohidratos, grasas y minerales. Por lo mismo, el forraje puede tener distintos niveles de esta materia.

  • Cambia el pienso

Otra opción para la alimentación del caballo en verano es cambiarle el pienso. De esta manera, la proporción entre forraje y pienso se mantendría estable, por lo que habría que hacer una sustitución a un pienso de menor aporte energético.

Sin embargo, esta solución conlleva de un control mucho mayor. ¿Por qué? Porque el caballo tiene un intestino especialmente delicado, por lo que un cambio de pienso puede acarrearles diversos problemas de digestión. Por eso, este cambio tiene que ser paulatino, finalizando dicha sustitución en aproximadamente dos semanas y que así los microorganismos del equino se hayan acostumbrado a la nueva dieta y siempre siendo revisado por el veterinario.

  • Reduce la presencia de polvo en el ambiente donde come

Si por algún motivo el caballo ha consumido alimento en malas condiciones, mostrará señales de diarrea, pérdida de apetito y cólico, por lo que debes estar atento a estos síntomas en el verano con mucha más atención.