En los últimos años mucho se ha hablado sobre los posibles riesgos y desventajas de comer carne roja, en especial porque puede suponer consumir un alto porcentaje de grasa, poco recomendable para personas que padezcan enfermedades cardiovasculares. Además, el consumo de carne roja se asocia con un incremento del riesgo de cáncer.
Pero también son muchos los beneficios de la carne roja. Y es que además de ser una excelente fuente de proteínas, también contiene vitaminas del grupo B (B1, B2; B3 y B12), nutrientes necesarios para el proceso de crecimiento y para la liberación de energía.
También poseen un alto contenido en hierro, ideales para personas que puedan padecer de anemia. Por todo ello, lo ideal es elegir siempre los cortes que posean una mayor cantidad de carne magra, para evitar así el consumo excesivo de grasa.
Con mucha frecuencia oímos hablar sobre la carne magra, pero también hay muchos que desconocen este término, por ello me gustaría explicarte su definición.
¿Qué es la carne magra? Se le llama carne magra a toda aquella carne animal compuesta casi en su totalidad por fibras musculares. Por lo tanto, tiene un contenido muy bajo de grasa y un porcentaje de proteínas más elevado que el resto de tipos de carnes. La carne magra, al contrario de lo que mucha gente piensa, puede ser tanto carne blanca como carne roja. Puede proceder de mamíferos, pescados o aves. La característica principal de la carne magra es que son cortes casi sin tendones, cartílagos, venas o tejido graso.
Ahora, ¿Por qué la carne roja no es tan mala para la salud como se piensa?
Muchas son las publicaciones que nos encontramos en internet de una multitud de mitos sobre el consumo de carne roja. Muchos de ellos afirman que este alimento no nos aporta nada a nuestro organismo e incluso algunos tienen la osadía de decir que pueden fomentar la aparición de enfermedades graves como el cáncer o la hipertensión.
De una forma u otra, te recomiendo siempre llevar una dieta sana y equilibrada en cualquier tipo de nutrientes. Se puede ingerir absolutamente de todo de forma tranquila y sin excesos para que así podamos disfrutar de los pequeños placeres que nos da la comida. Obviamente habrá alimentos que podremos ingerir sin miedo alguno a represalias para nuestra salud (como por ejemplo las frutas y las verduras en general).
Pero habrá otras, que debido a su alto contenido en grasas como ocurre con la carne roja, no quedará más remedio que consumirla de una forma más limitada. ¿Significa esto que nunca la podamos disfrutar un par de veces por semana? Nada más lejos de la realidad. De hecho, a través de este artículo te voy a relatar los beneficios que tiene la carne roja para nuestra salud.
- La carne roja es una gran fuente de hierro
Uno de los principales beneficios que aporta el consumo de carne roja, es sin lugar a dudas su gran contenido en hierro, un elemento esencial para el correcto funcionamiento de nuestro organismo. La clave está en la cantidad. La propia OMS (Organización Mundial de la Salud) no desaconseja su consumo y aconseja hacerlo en cantidades pequeñas, no más de 50 gramos.
Aquí depende un poco del tipo de carne y corte que consumamos. Pero para que te hagas una idea, un par de filetes a la semana nos aportarán la cantidad de hierro necesaria para que los glóbulos rojos transporten el suficiente oxígeno través de todo nuestro organismo. Así mismo, el consumo de hierro también fomenta lo siguiente:
- Ayuda concentrarse mejor. De ahí que sea un alimento a tener muy en cuenta para estudiantes o trabajadores que tienen déficit de atención.
- Fortalece todo nuestro sistema inmunológico. Esto provocará que seamos menos propensos a sufrir cualquier gripe o resfriado.
- Previene la aparición de otras enfermedades más graves como la anemia.
- La carne roja posee un alto contenido en vitamina B
Otra de las ventajas que aporta consumir carne roja un par de veces a la semana, está relacionada sobre todo con el alto contenido en vitaminas del tipo B que también son muy necesarias para ganar en calidad de vida.
Por ejemplo, las vitaminas B6 fortalecerán todo nuestro sistema inmunológico y preverán la aparición de ciertas enfermedades víricas. Por otro lado, la vitamina del tipo B12 es realmente beneficiosa para nuestro riego sanguíneo y por tanto puede evitar la aparición de coágulos o enfermedades relacionadas con el corazón.
- Proteínas, otros de los componentes esenciales de la carne roja
La carne roja también es una fuente inagotable de proteínas, uno de los componentes más básicos para un correcto funcionamiento de nuestro organismo. Y entre sus ventajas más notorias, cabe destacar que las proteínas contienen suficientes aminoácidos que propician que cualquier músculo de nuestro cuerpo se desarrolle de una forma mucho más sana y resistente.
El consumo de proteínas provenientes de la carne roja también nos ayuda a prevenir ciertas enfermedades ya que gracias a ellas producimos enzimas y hormonas de manera completamente natural. Y por último, el consumo de carne roja también está ligado a la pérdida de peso ya que posee cierto carácter saciante después de ingerir cualquier comida.
¿Qué contraindicaciones tiene la carne roja?
Sin embargo, como ocurre con cualquier alimento, el consumo EXCESIVO y descontrolado de la carne roja también puede tener las siguientes contraindicaciones que te lo resumiré a continuación:
Su contenido grasa y sal puede provocar a la larga algunas enfermedades relacionadas con el corazón que se pueden traducir después en enfermedades cardiovasculares. Pero solo si se consume de una forma descontrolada.
Puede provocar diabetes y exceso de colesterol en venas y arterias. Debido a que muchas de las carnes procesadas tienen grasas saturadas y azúcares, sobre todo las que provienen de los restaurantes de comida rápida.
Manera adecuada de consumir carne roja
La carne roja, consumida de la manera correcta, no provoca ningún daño para la salud, además de que se evita el sobre peso u obesidad. Principalmente hay que tener en cuenta las porciones adecuadas de este alimento y otros consejos que te diré a continuación.
- Se pueden preparar al horno o a la parrilla, el cual es una preparación que permite que el proceso de cocción no incluya grasa de más, evitando así el consumo de calorías extras.
- Antes de cocinar te recomiendo retirar la grasa de más que se encuentra en la carne roja, de esta manera se evitara el consumo excesivo de calorías.
- Además del contenido en proteínas vitamínico que la carne contiene, no está de más acompañarla con vegetales y en ciertos casos y aunque no sea muy común con frutas, provocando así un mayor incremento de vitaminas.
- Apuesta por la carne ecológica. Las cualidades organolépticas de la carne influye el tratamiento que se da a la carne ya desde el sacrificio, así como los procesos de maduración y el fileteado. Los productores y comercializadores de carne ecológica siguen normas más estrictas en este sentido, por lo que su carne suele tener mayor calidad.
Si la carne roja se prepara de la manera correcta se puede ingerir sin sufrir ninguna complicación de salud, pero hay que tener presente que este alimento mal cocinado e ingerido diariamente puede llevar a una persona a sufrir serios problemas de salud, así que ya sabes que aunque contenga minerales y vitaminas, lo más recomendable es consumirla en pequeñas porciones 2 o 3 veces a la semana, así evitarás los excesos y podrás llevar una vida sana.